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‘Aunque exista desgaste charista, (hasta ahora) no hay otra alternativa atractiva para la ciudadanía’: Ángel Tuirán

Los Char manejan la Alcaldía de Barranquilla desde 2008. Buscan retenerla por los próximos cuatro años. Si lo logran, completarán dos décadas en el poder local. /Foto: Tatiana Velásquez

‘Aunque exista desgaste charista, (hasta ahora) no hay otra alternativa atractiva para la ciudadanía’: Ángel Tuirán

El investigador Ángel Tuirán analiza los factores electorales que podrían determinar la continuidad de los Char en la Alcaldía de Barranquilla o la llegada de un nuevo grupo, relevo que a menos de siete meses de elecciones no se ve tan factible.

*Esta entrevista forma parte de una serie periodística de La Contratopedia Caribe con académicos y analistas políticos para aportar a la discusión electoral en Bolívar y Atlántico, de cara a las elecciones regionales.

Los electores barranquilleros llegarán a las urnas, este 29 de octubre, a votar por la continuidad de los Char en la Alcaldía —que aunque llegan desgastados después de 16 años consecutivos en el poder aún tienen apoyo popular y músculo político— o a buscar una alternativa que ofrezca un nuevo rumbo para la ciudad.

Las apuestas electorales están dadas, por ahora, para que los Char retengan la Alcaldía hasta 2027, pese a las denuncias de corrupción que cada vez más golpean a sus integrantes y a la reciente investigación que la Corte Suprema de Justicia le abrió a Arturo Char y por la que renunció al Senado, en enero pasado.

Para arrojar luces sobre el clima político, aún frío en Barranquilla, La Contratopedia Caribe habló con Ángel Tuirán, analista político y docente del Departamento de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad del Norte.

Ángel Tuirán, investigador y docente de la Universidad del Norte.

La Contratopedia Caribe (LCC). ¿Cuáles son los factores demográficos, económicos y de cultura política de Barranquilla que influyen en las elecciones regionales?

Ángel Tuirán (AT). Existen diversas influencias que podrían determinar los resultados electorales de las próximas elecciones de octubre en Barranquilla. En primer lugar, el proyecto político liderado por la casa Char se presenta como una opción consolidada y apoyada de norte a sur. 

Es posible que muchos votantes apuesten por la continuidad de este proyecto, en lugar de arriesgarse con la posible incertidumbre de un cambio de liderazgo en la Alcaldía.

Es importante considerar las lógicas clientelares que han influido en elecciones anteriores en Barranquilla, en el Caribe y en el país en general. En este sentido, existen intermediarios y operadores electorales que tienen una clientela cautiva y que pueden apoyar a candidaturas que les ofrezcan recursos económicos, burocráticos o de contratación inmediatos, o incluso promesas de estos recursos al llegar al poder. 

Hay expectativa en torno a un proyecto político recién nacido, como la coalición del Pacto Histórico a nivel nacional, que podría presentarse como una alternativa a la propuesta liderada por la casa Char en Barranquilla. 

Es posible que esta expectativa genere un mayor interés en las elecciones regionales y aumente la posibilidad de una disputa por el liderazgo de la ciudad.

El charismo logró retener la Alcaldía hasta 2023 con los 309.300 votos que Jaime Pumarejo obtuvo en 2019. Sin embargo, la sumatoria electoral de los demás candidatos y el voto en blanco arroja un caudal sólido, 186.058 sufragios. Posible evidencia de que en Barranquilla un amplio sector quiere otro estilo de gobierno local.

Esa cifra aumentará o disminuirá, en octubre próximo, según las candidaturas que logren consolidarse como oposición a los Char y, por supuesto, de acuerdo al candidato que ese grupo político escoja para la actual contienda.

LCC. Entonces, hay dos posibilidades: la continuidad de los Char o votar por un proyecto distinto. A partir de los últimos cuatro años de gobierno de la casa Char en la Alcaldía de Barranquilla, ¿considera que ese grupo político tiene condiciones favorables para continuar en el Paseo de Bolívar?

AT. Se pueden identificar algunas posibles debilidades del proyecto político actual liderado por la casa Char. Se puede notar que no cuentan con la misma fuerza electoral de hace cuatro años. La aspiración del exalcalde Álex Char a la Presidencia, que no terminó bien y que puso en el ojo público algunas prácticas cuestionables, como la corrupción y el clientelismo, puede ser una de las causas. 

Todo esto ha debilitado la imagen del proyecto político en términos de trascendencia e importancia a nivel nacional.

También se puede señalar que la llegada de un proyecto político diferente, como el Pacto Histórico, ha disminuido la comunicación del Gobierno Nacional con la casa Char, lo que dificulta la asignación de recursos para proyectos que necesiten cofinanciación central. 

Sin embargo, en términos electorales prácticos, el proyecto de la casa Char todavía tiene un apoyo electoral de gran parte del Concejo y otros líderes electorales en la ciudad.

Hasta el momento no hay una candidatura o un proyecto político consolidado que pueda competir con la casa Char, en términos de oferta política para la ciudad. 

Aunque hay voces críticas que señalan problemas en materia de contratación y decisiones de política pública, todavía no hay un candidato o candidata que haya presentado una propuesta sólida para liderar la ciudad los próximos cuatro años.

LCC. Analizando el comportamiento de la participación electoral de los últimos años en Barranquilla, queda claro que el charismo ha barrido. Sin embargo, podemos observar que, pese a que acaparan la gran mayoría de los votos barranquilleros, se viene presentando un declive en la votación del clan. ¿Por qué?

AT. Efectivamente, se ha registrado una disminución en el número de votos. Sin embargo, esta tendencia también se ha observado en elecciones en las que Álex Char no ha sido el candidato. Y es que el candidato pesa mucho al momento de analizar la disminución o el aumento de votos.

Existen dos escenarios posibles a considerar. Por un lado, una precandidatura liderada por Carlos Acosta, un funcionario cercano al actual alcalde y al proyecto político actual. Es posible que se registre una disminución en el número de votos en comparación con elecciones anteriores. 

Por otro lado, si esa candidatura no logra despegar en términos electorales, es posible que Álex Char vuelva a ser el candidato y en ese caso se podría registrar una votación similar o, incluso, mayor a la de elecciones pasadas, ya que en su precandidatura a la Presidencia, Char tuvo una votación aceptable en Barranquilla.

También se ha observado un desgaste natural del proyecto político actual. Esta administración tiene el impacto de la pandemia, que ha evidenciado muchos de los problemas que tiene la ciudad y que no han sido atendidos en términos de política pública, por el énfasis en infraestructura. 

Pero, aunque exista el desgaste, no hay en estos momentos otra alternativa significativa ni atractiva para la ciudadanía. Eso lo demuestra la votación de 2019, en la que el segundo lugar fue el voto en blanco.

En 2019, Jaime Pumarejo Heins obtuvo 309.300 votos, que representaron el 62.43% de la votación. En segundo lugar marcó el voto en blanco con 79.852 sufragios.

El tercer lugar fue para el candidato del Polo Democrático Antonio Bohórquez, quien con 66.315 votos logró llegar al Concejo, gracias al Estatuto de Oposición que establece una silla para el segundo candidato mayor votado en las elecciones distritales o municipales.

LCC. En los últimos 10 años, en Cartagena el perfil que ha cautivado a la mayor parte de los votos en la carrera por la Alcaldía ha sido el de personas que no forman parte de casas políticas tradicionales. En el caso de Barranquilla, ¿cuál cree es el perfil del gobernante que buscan los barranquilleros? 

AT. Actualmente, Cartagena se encuentra en una dinámica de oligarquía competitiva, donde diferentes casas políticas compiten por la Alcaldía. En el contexto de desafección política que hoy tenemos, actores lejanos a la élite política y al establecimiento han logrado atraer a la población desencantada con la política tradicional. 

Esto ocurrió en Barranquilla antes del proyecto político Char. En los años 90, surgió el proyecto liderado por Bernardo Hoyos, un outsider que administró la ciudad por 16 años y generó un gran desgaste debido a hechos de corrupción. 

Después de su destitución, la familia Char volvió a competir por la Alcaldía y su proyecto político ha sido efectivo en términos electorales, gracias al carisma de Alejandro Char y su propuesta de gobierno, que recuperó el orgullo en la ciudad y apostó por una mejoría.

En cuanto a la oferta de otros candidatos, ninguno puede desconocer completamente esta apuesta de ciudad de los Char y su proyecto político. Aunque algunos ajustes y mejoras pueden ser necesarios, es evidente que la propuesta de los Char ha sido comprada por los ciudadanos barranquilleros. 

Además, la ausencia de un proyecto político concreto y estructurado que pueda contrarrestar la oferta de la casa Char durante los últimos 16 años ha hecho que otras fuerzas políticas no logren consolidarse como una oposición efectiva. 

El Movimiento Ciudadano fue una fuerza de izquierda con amplio apoyo popular en Barranquilla que llegó a la Alcaldía en cuatro oportunidades, a través de dos mandatos de Bernardo, el cura, Hoyos (1992-1994 y 1998-2000); Édgar George (1995-1997) y Guillermo Hoenigsberg (2004-2007). 

Tanto a Hoyos como a Hoenigsberg el Tribunal Superior de Barranquilla los condenó por los delitos de contrato sin cumplimiento de requisitos legales y peculado por apropiación, por la remodelación y adecuación de un edificio donde se ubicaría la alcaldía de Barranquilla.

La Justicia demostró que desviaron recursos del Distrito para favorecer a un contratista.

La debacle de la ciudad aquellos años pavimentó la llegada y posterior consolidación de los Char en el poder local.

LCC.  En la respuesta inicial mencionó el papel de la nueva fuerza nacional en las elecciones locales. Por lo menos en Barranquilla, el Pacto Histórico tuvo una alta votación en las presidenciales. Sin embargo, no siempre el comportamiento electoral nacional se ve reflejado en las elecciones locales. ¿Qué tanto influirán los poderes nacionales en las elecciones locales? 

AT. El análisis subnacional (regional) es bastante importante porque no necesariamente se comporta como un espejo en términos de lo nacional. El votante bien puede votar por Gustavo Petro, a nivel de Presidencia, y bien puede votar nuevamente por el candidato de la casa Char o por Alejandro Char, a nivel de elecciones regionales. 

Entendiendo que en ambos encuentra una oferta de mejoramiento de sus condiciones de vida y de nivel de satisfacción de sus necesidades. Por otro lado, en Colombia siempre estamos personalizando la política: el partido de los Galán, el partido de Roy, el partido de Petro, el partido de Robledo. 

Aunque el presidente Gustavo Petro cuenta con apoyo en la ciudad, el candidato del Pacto tendrá dificultades debido a como es el Pacto: una confluencia de fuerzas y miradas sin un liderazgo claro. Entonces, posiblemente pueda hablarse de una alianza con la casa Char, mientras otros sectores de izquierda dentro del Pacto no estarían muy de acuerdo. 

Pero, en general, no tienen un candidato visible que logre disputar un espacio real en la ciudad.

La izquierda local aún no define quién será su candidato porque esa decisión depende de las directrices nacionales del Pacto Histórico. Desde Bogotá barajan varios mecanismos de selección de los candidatos a alcaldías y gobernaciones, ante las distintas corrientes bajo el paraguas de ese grupo político de gobierno.

A ese escenario se suma el torpedo político o efecto Day que cayó sobre el diputado Nicolás Petro, una de las figuras más visibles del Pacto Histórico en Atlántico: el 2 de marzo pasado, Day Vásquez le dijo a Revista Semana que Petro hijo, su expareja, les recibió dinero a dos figuras cuestionadas del Caribe durante la campaña presidencial en 2022.

Con sus señalamientos de dineros irregulares, supuestamente entregados por el condenado por narcotráfico Samuel Santander Lopesierra y el investigado empresario Alfonso Hilsaca, Vásquez relacionó tanto a Petro hijo como a su candidato a la Gobernación de ese departamento, Máximo Noriega, con prácticas electorales corruptas. 

LCC.  ¿Cómo se compara el comportamiento electoral de los ciudadanos en las elecciones a Alcaldía con el de las elecciones al Concejo? 

AT. Los concejales y quienes aspiran al Concejo tienen un trabajo, en su mayoría, social, focalizado en localidades, barrios y comunidades. A su vez, este trabajo puede ir de la mano de la transacción clientelar, lo que les permite consolidar un tejido de apoyo y lealtad que a su vez se traduce en ofertas políticas o institucionales como intermediarios entre la administración y la población. 

Hay concejales con una trayectoria de mucho tiempo en el Concejo y otras fuerzas y candidaturas que son más recientes y apoyadas por actores políticos tradicionales en la ciudad.

La mayoría de los concejales apoyan el proyecto político predominante y no cuestionan su mandato. En cuanto a las candidaturas de los actuales concejales, la mayoría se hará dentro del marco de ese proyecto político, independientemente de su partido de origen. 

Sin embargo, las fuerzas del Pacto Histórico y otros partidos progresistas están organizando candidaturas al Concejo con un discurso crítico a la administración actual. 

Es posible que se produzcan cambios en el Concejo con la entrada de concejales o concejalas que no estén tan cercanos al proyecto político predominante (el de los Char) y que planteen una oposición efectiva, un control político y una propuesta de ciudad diferente.  

LCC. Para finalizar, sea cual sea el resultado de estas elecciones, ¿cómo cree que lo que ocurra el 29 de octubre próximo afectará el futuro político de Barranquilla?

AT. El escenario que estamos viendo se divide en dos posibilidades: continuidad o cambio. Si se da continuidad al proyecto actual de la casa Char, los próximos cuatro años estarán marcados por una mayor veeduría, debilidad política y, quizás, mayor controversia política.

Además, habrá diferencias en las relaciones entre el Distrito y el nivel nacional debido a las particularidades del proyecto político nacional.

Si gana un proyecto político diferente, la toma de decisiones públicas será difícil debido a que los actores del proyecto político Char no sólo son políticos, sino también económicos y sociales. En este caso, los nuevos gobernantes tendrán que articularse y trabajar con los sectores que han apoyado el proyecto actual y demostrar experiencia en la toma de decisiones públicas.

En cualquier escenario, ya sea continuidad o cambio, se necesitará una gestión técnica en términos administrativos para llevar adelante las propuestas electorales y hacer cambios efectivos en la ciudad

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