Este contenido forma parte de la investigación ‘Así funciona el modelo de contratación charista en la Gobernación del Atlántico’, posible gracias a la iniciativa ‘Desafío en Contrataciones Abiertas’ , del Open Contracting Partnership.
Tal como ha ocurrido durante la última década en Barranquilla, los medios de comunicación (locales y nacionales) han sido jugadores clave en la construcción de una imagen favorable del gobierno de Elsa Noguera.
Entre los megacontratos del Departamento, hay casi $50.000 millones entregados a agencias publicitarias, empresas de impresión y productoras audiovisuales para la generación de contenido promocional sobre la administración departamental y el Atlántico.
Esos contratos siguen la misma línea de contratación de los tres últimos gobiernos de Barranquilla, bajo el mando de la familia Char. Es decir:
- Parte de la pauta se usa para elaborar contenidos patrocinados que se divulgan como material noticioso.
- La estrategia de comunicaciones incluye gestión de crisis para mitigar posibles daños reputacionales y apostar por una narrativa favorable, con el apoyo de periodistas locales.
- Prevalece la opacidad informativa porque no es fácil hacerle seguimiento a la ejecución de los recursos entregados.
- Hay un grupo de contratistas recurrentes.
Como contó La Contratopedia en una historia publicada en febrero pasado sobre pauta oficial, varias de esas características no son exclusivas del Atlántico y se replican en varias regiones del país.
Sin embargo, esa generosa chequera —que representa el 1,1% del total del presupuesto anual de la Gobernación— contrasta con las inversiones de la administración de Eduardo Verano, antecesor de Noguera, y con las de gobiernos vecinos en el Caribe, como la Gobernación de Bolívar o la Alcaldía de Cartagena.
Por ejemplo, el gobierno de Vicente Blel en Bolívar gastó, en 2021, $2.103 millones, incluyendo el pago de órdenes de prestación de servicios. Mientras que el de Elsa Noguera destinó $15.663 millones solamente en contratación con agencias y servicios de pauta. Una diferencia abismal pese a que ese año Bolívar tuvo mayor presupuesto (1,9 billones) que Atlántico (1,5 billones).
La millonaria chequera en pauta y medios, dispuesta por los gobiernos charistas, ha llamado la atención de la Fundación para la Libertad de Prensa (Flip) en más de una ocasión.
Esa entidad, incluso, ha calificado la relación entre los medios en Barranquilla y las administraciones locales como “tóxica” porque “los recursos de publicidad oficial”, a veces, son utilizados como “una herramienta que fomenta los aplausos y siembra temor ante la crítica”.
El gobierno Noguera no considera millonaria la inversión de casi $50.000 millones en comunicaciones y pauta, porque son recursos ejecutados durante tres años y justifica ese gasto por tres razones:
Primero, por la necesidad institucional de implementar estrategias de comunicación para rendir cuentas de manera permanente, socializar el Plan de Desarrollo y difundir las diferentes campañas que de esa hoja de ruta se desprenden.
Entre ellas, Atlántico con Vida (programa de vacunación y lucha contra el Covid 19), Atlántico a toda marcha (programa de reactivación económica), Agua para la gente, Parques para la gente, Vivienda para la gente y Sazón Atlántico.
Segundo, por la necesidad de sostener la difusión de las campañas a través de diversos mecanismos y medios masivos para lograr mejores resultados y “una imagen de acercamiento hacia los temas que preocupan a la comunidad”.
Y tercero porque el Departamento requiere de una estrategia de mercadeo y promoción turística para posicionarse a nivel nacional e internacional. Esa es “una de las grandes apuestas en términos de reactivación económica y desarrollo del departamento”, respondió la Gobernación.