Gobernación de Bolívar tampoco entregará este mes megacolegios de Altos del Rosario y Cicuco

El próximo 30 de septiembre vence el más reciente plazo que la Gobernación de Bolívar le dio al Consorcio Educentral 005 para que entregue los megacolegios Alejandro Durán Díaz, en Altos del Rosario, y San Francisco de Loba, en Cicuco, en el sur de Bolívar. Sin embargo, para esa fecha la infraestructura educativa, que el exgobernador Vicente Blel Scaff prometió entregar en 2022, tampoco estará lista.

Esas dos obras forman parte de un paquete de cuatro megacolegios que la administración Blel le adjudicó a ese contratista en octubre de 2021. Dos ya fueron entregadas recientemente por Yamil Arana, es decir, casi dos años después.

La Contratopedia Caribe conoció, por fuentes en terreno, que desde mediados de agosto están paralizadas las obras civiles en el megacolegio de Altos del Rosario, porque el Consorcio no les ha pagado a los obreros.

Para ese nuevo colegio, la Gobernación de Bolívar anunció una inversión inicial de $14.386 millones y en mayo de 2023 le adicionó $6.899 millones por obras que, según el contratista, no estaban contempladas.  

El panorama es similar en Cicuco. En la construcción del megacolegio en el corregimiento de San Francisco de Loba, los obreros han suspendido las labores dos veces en lo que va del segundo semestre de 2024. Apenas este lunes 9 de septiembre retomaron labores.

Para esa nueva infraestructura educativa, la administración Blel destinó inicialmente $13.722 millones, un monto que el año pasado aumentó a $19.259 millones, tras una adición de $5.557 millones.

En ambas instituciones educativas, la promesa incumplida de la Gobernación de Bolívar ha afectado el normal desarrollo académico, porque la población escolar dicta y recibe clases en condiciones inadecuadas por la falta de aulas. Incluso, ha habido disminución en la matrícula.

Las razones por las que otra vez incumplirán 

El 13 de julio de este año, a dos días de cumplierse el quinto plazo para que el Consorcio Educentral 005 le entregara a la Gobernación de Bolívar los cuatro megacolegios que construye desde 2021, la secretaria privada de la Gobernación, Adriana Trucco, y el representante legal del Consorcio, Hernán Fortich Mendoza, firmaron un nuevo otrosí (modificación al contrato) para ampliar el plazo de ejecución.

La nueva fecha que Trucco y Fortich acordaron fue el 30 de septiembre de 2024. Sin embargo, hasta ahora ese contratista sólo ha cumplido con la entrega de la mitad de las obras que le adjudicó la administración Blel en octubre de 2021: 

• El megacolegio para la Institución Julio Faciolince, en Barranco de Loba, inaugurado en junio pasado.
• Y el megacolegio para la Institución Educativa Técnica Agropecuaria y Minera, de San Martín de Loba, entregado en agosto.

Entre las razones que el Consorcio Educentral 005 le dio a Trucco para pedirle un plazo adicional de dos meses y 15 días están la sequía de inicio de año y las posteriores lluvias de mayo.

La sequía generó “una drástica disminución del caudal del Río Magdalena”, que impidió “la navegación de embarcaciones” para transportar materiales hacia Altos del Rosario y Cicuco.

Mientras que los aguaceros afectaron los trabajos en el corregimiento de San Francisco de Loba. “Estas condiciones climáticas adversas han impedido el normal desarrollo de las actividades constructivas, afectando la productividad de las cuadrillas”, se lee en el más reciente otrosí.

Esas razones del contratista contrastan con lo que en terreno han evidenciado docentes, líderes comunitarios y otros miembros de la comunidad escolar.

Por ejemplo, en el megacolegio de San Francisco de Loba los trabajos de este año sólo comenzaron en firme en mayo y desde entonces los obreros los han suspendido, al menos, tres veces porque el contratista no les paga a tiempo sus honorarios o por falta de materiales.

“En este segundo semestre ya han parado dos veces. Este mes los obreros apenas empezaron el lunes 9, porque no les habían pagado y ellos dicen que la única forma de que les paguen es suspendiendo”, le dijo a La Contratopedia Caribe Elías Díaz, rector del plantel.

Al megacolegio de San Francisco de Loba aún le falta un buen trecho para estar listo, porque, según detalló el rector, están pendientes los techos y la mampostería. Tampoco están construidos la cancha, el área administrativa ni los estacionamientos.

“El contratista nos dijo, en la última reunión que tuvimos, que podíamos empezar a usar el megacolegio en diciembre, pero no creo. Estará, si acaso, para marzo de 2025”, expresó Díaz.

En Altos de Rosario contradicen la versión que el contratista le dio a la Gobernación para prorrogar los trabajos. Por el contrario, aseguran que el Consorcio es responsable de buena parte del retraso.

Un líder de esa comunidad, que le ha hecho seguimiento a la ejecución  pidió no ser citado para evitarse líos con el contratista, le dijo a La Contratopedia que cuando empezó el año eran pocos los obreros en la obra. 

La explicación que le dio el Consorcio Educentral a la comunidad —dijo— fue que estaban priorizando la construcción de los megacolegios de San Martín y Barranco, que, en efecto, ya fueron entregados.

“Nos prometieron que al terminar allá (en San Martín y Barranco) aumentarían las cuadrillas de acá. Eso lo cumplieron al principio, porque hubo días en los que llegaron a trabajar hasta 60 obreros, pero ahora les volvieron a incumplir con el pago y ya desde la segunda semana de agosto ellos pararon. Sólo están trabajando los encargados de soldadura”, detalló la fuente que habló bajo anonimato.

Aunque este megacolegio va más adelantado que el de San Francisco de Loba, para que abra sus puertas falta la construcción de las aulas de preescolar, del área administrativa, la cancha y las estructuras que unirán los bloques ya edificados.

Aún en el Sistema Electrónico de Contratación Pública (Secop), la Gobernación no publica un otrosí con una nueva fecha de entrega.

Mientras las ejecuciones en Altos del Rosario y Cicuco siguen retrasadas, los estudiantes de ambos colegios reciben clases en pésimas condiciones.     

Clases en enramadas y disminución en la matrícula

Al menos 250 estudiantes de bachillerato de la Institución Educativa Alejandro Durán de Altos del Rosario reciben sus clases, desde el inicio del calendario escolar 2024, debajo de árboles (enramadas) porque para darle paso a la nueva infraestructura educativa el contratista demolió parte de la existente hasta finales de 2021.

La comunidad educativa accedió a la demolición porque la promesa de la Gobernación era entregar el nuevo megacolegio en diciembre de 2022. Sin embargo, casi dos años después siguen padeciendo por la falta de aulas para dictar y recibir las clases.

En 2023 debieron implementar la jornada académica en horario vespertino, pero esa estrategia no tuvo acogida entre los padres de familia, porque muchos de los estudiantes viven en barrios apartados del plantel.

En el San Francisco de Loba, zona rural de Cicuco, también hay problemas. Los estudiantes están hacinados  porque en un salón hay más de un curso y en algunos casos, ante las altas temperaturas, deben salir a buscar refugio debajo de los árboles.

En 2023, la Gobernación arrendó unos locales en la población, pero en esos espacios no estaban dadas las condiciones para impartir clases, denunció en su momento un líder de esa población.

El rector Elias Díaz manifestó que por los retrasos en esa institución disminuyó la matrícula. “La matrícula bajó un 20%. Ahora tenemos unos 550 estudiantes de preescolar a 11”, dijo.

La Contratopedia Caribe contactó a la secretaria Trucco, pero no respondió los mensajes dejados para consultarle por los argumentos del contratista ante la parálisis de las obras.

Aunque la Gobernación y el contratista les han insistido a los rectores que las obras estarán listas este año, el panorama en terreno evidencia que este año escolar también lo terminarán en condiciones adversas.