
La Alcaldía de Cartagena le dio plazo al constructor hasta el 25 de marzo para que el megacolegio esté listo. /Foto: Ofiprensa Alcaldía.
Megacolegio de Tierra Baja: nueve años de espera, dos prórrogas y una adición
La ejecución de ese colegio y la interventoría, presupuestadas en $15.219 millones, terminarán costando $21.091 millones. La obra, prometida desde 2016 por el Distrito, debió estar lista en abril de 2024. Historia de una ejecución torpedeada.
Por:
Súmate a nuestra Vaki para ponerles lupa a las megaobras en Bolívar y Atlántico. Si crees en el periodismo que hacemos y consideras que nuestro trabajo agrega valor a la discusión pública, aporta desde $3.000 hasta $1.500.000. Gracias por ayudarnos a hacer público lo público. Aporta aquí. |
La construcción del megacolegio para el corregimiento de Tierra Baja, en el norte de Cartagena, ha ocupado titulares en la prensa local desde el pasado 21 de febrero, porque el alcalde Dumek Turbay anunció, después de una inspección de obras, que los estudiantes deberán volver a las nuevas instalaciones el 21 de abril, terminado el receso escolar de Semana Santa.
En ese recorrido, que realizó junto a concejales y delegados de la Procuraduría, Turbay indicó que no habrá más plazos para que el Consorcio JM Cartagena entregue el megacolegio.
Cinco días después de esa visita, el 26 de febrero, la administración distrital firmó un nuevo otrosí (modificación al contrato) para darle plazo al contratista hasta el 25 de marzo —el último, según Turbay— para culminar el megacolegio que la población de Tierra Baja lleva casi una década esperando, tras un anuncio fallido de construcción en 2016.
Para que esas obras empezaran, los habitantes debieron, incluso, interponer una acción de tutela en 2019: un juez le ordenó al Distrito realizar los trámites necesarios para construir el plantel.
Lo que hasta ahora ha pasado de agache es que el nuevo megacolegio terminará costándoles a los cartageneros $5.871 millones más de lo presupuestado en 2022, cuando la administración del alcalde William Dau finalmente adjudicó los contratos de construcción e interventoría, con la promesa de que el plantel estaría listo en abril de 2024.
Sin embargo, no estuvo lista para esa fecha porque el gobierno de Dau se la heredó con varias obras no estipuladas en el contrato a la administración de Dumek Turbay.
Ese hecho es el más reciente de una serie de tropiezos que han marcado esa construcción. Entre ellos, la suspensión de los trabajos por más de seis meses, la solicitud de nuevas licencias y dos prórrogas al plazo de entrega.
La torpedeada ejecución

En enero de 2023, la Alcaldía de Cartagena le adjudicó al Consorcio JM Cartagena la construcción y dotación del megacolegio de Tierra Baja, por $14.229 millones, y al Consorcio Edificaciones LAM, la interventoría a esos trabajos por $989.799.900.
La construcción de este plantel empezó en abril de 2023 y en el acta de inicio quedó estipulado que un año después, el 10 de abril de 2024, debía estar listo.
Sin embargo, el 17 de febrero de 2024, dos meses antes de ese plazo, el contratista le solicitó al Consorcio Edificaciones LAM, en su calidad de interventor, verificar la necesidad de una adición de $2.380 millones y 45 días adicionales.
El Consorcio JM Cartagena alegó que las lluvias e inundaciones en la zona de construcción habían afectado el normal desarrollo del cronograma de trabajo. Además, debía incluir obras que no estaban previstas en el contrato inicial, como:
- El cerramiento del lote en el que se construye el megacolegio.
- La instalación de un ascensor para uno de los bloques de aulas.
- Un diseño de redes eléctricas distinto al estipulado en el contrato inicial.
- Y nuevos diseños para varias áreas del plantel.
Esa solicitud de más dinero y tiempo fue avalada por la interventoría, que la remitió al Distrito. En ese momento con nueva administración, la de Dumek Turbay. Sin embargo, no hubo respuesta.
Ante ese silencio y en vista de que el 10 de abril de 2024 se vencía el plazo del contrato, el Consorcio JM Cartagena pidió, el 2 de abril, suspenderlo durante “45 días calendario” para definir “claramente el alcance del proyecto” y contar “con todos los elementos necesarios” para terminar el megacolegio.
El 8 de abril de 2024, dos días antes del vencimiento del contrato, la secretaria general del Distrito, María Patricia Porras, se reunió con los representantes legales de los consorcios constructor e interventor y acordaron frenar las obras.
Según la petición de JM Cartagena y la suspensión aprobada por el Distrito, los trabajos debían reiniciarse el 23 de mayo. Sin embargo, fue sólo hasta el 30 de octubre de 2024 que se reactivaron, por lo que estuvieron suspendidos por más de seis meses.
Durante ese tiempo, el contratista debió solicitar nuevos permisos de construcción en la Curaduría Urbana número 1 de Cartagena, para ejecutar las obras de cerramiento que no estaban contempladas inicialmente.

Además, en distintas reuniones, las directivas del colegio de Tierra Baja le solicitaron al Distrito contratar obras de urbanismo complementarias para el megacolegio, como:
- Un parque infantil.
- El cerramiento para la cancha.
- Una plazoleta.
- Y la instalación de bancas.
Esas nuevas obras aumentaron el valor de la adición solicitada por el Consorcio JM Cartagena en febrero de 2024.
Más dinero y nuevo plazo
Mientras tramitaba nuevos permisos y rediseñaba el cronograma de trabajo, el Consorcio JM Cartagena solicitó, el 12 de julio de 2024, una adición de $5.276 millones, cifra que duplicó el monto pedido a la Alcaldía en febrero de ese año.
En esa misma petición, el contratista solicitó plazo hasta el 27 de febrero de 2025 para entregar el megacolegio. La Alcaldía le dio luz verde el 30 de octubre, fecha en la que se reactivaron los trabajos.
Sin embargo, el pasado 27 de febrero, el megacolegio tampoco estuvo listo, porque el contratista le pidió al Distrito otros 45 días para culminar los trabajos. En carta enviada el 14 de febrero, el Consorcio JM Cartagena dio dos razones:
- La primera fue que durante noviembre y diciembre de 2024 se presentaron al menos 40 lluvias que afectaron el cronograma.
- Y la segunda, que una vez el contratista empezó la preparación del terreno para la construcción del cerramiento, en la entrada principal al megacolegio, la comunidad se opuso solicitando el traslado de los muros de esa zona a otro punto del lote.

La Alcaldía aceptó ampliar el plazo, pero en lugar de los 45 días solicitados aprobó 26 y estableció el 25 de marzo como la nueva fecha de entrega. Con ese nuevo plazo vigente, el contratista tiene menos de tres semanas para dotar y entregar aulas, baños, laboratorios, zona administrativa y demás espacios del megacolegio.
Y debe tener todo listo el 25 de marzo, porque el Distrito necesita las tres semanas siguientes para desarrollar una serie de actividades administrativas que permitan la llegada de la comunidad educativa el 21 de abril, después de Semana Santa.
La larga espera de Tierra Baja
El megacolegio de Tierra Baja, que debe estar listo este primer semestre de 2025, llega tras una larga espera y varias promesas incumplidas de gobiernos distritales.
El primer intento fallido de construcción fue en 2016, cuando la administración de Manuel Vicente Duque anunció que la obra se realizaría con recursos del Distrito y del Ministerio de Educación. Sin embargo, en 2018 el proyecto se frenó.
Los recursos que habían sido destinados para el colegio de Tierra Baja fueron invertidos en otras instituciones públicas del Distrito.
Esa medida obligó a la comunidad a interponer una acción de tutela en 2019. En respuesta, el Juez 16 Civil Municipal de Cartagena le ordenó a la Alcaldía empezar los trámites necesarios para construir el plantel. A pesar de esa orden, fue apenas a finales de 2022 cuando la administración distrital, en cabeza de William Dau, convocó la licitación para construir el megacolegio.